La eficiencia general de los equipos se mide mediante una razón porcentual que mide el aprovechamiento integral de la maquinaria industrial. Esta razón se conoce como OEE o ETE (Efectividad Total de los Equipos). En www.proyectainnovacion.com son expertos en realizar este tipo de mediciones que resultan vitales para poder evaluar el funcionamiento de una empresa.
Se calcula partiendo de tres razones porcentuales, la disponibilidad, la eficiencia y la calidad con una formula que queda así:
OEE= Disponibilidad * Eficiencia * Calidad
Para valorar la disponibilidad se tienen en cuenta las paradas y ajustes que frenan la producción. Para la eficiencia o rendimiento se valoran pequeñas paradas o posibles reducciones de velocidad y para la calidad, lo que más peso tiene son los rechazos de la producción.
Si el resultado es inferior al 65% (Inaceptable) la competitividad sería muy baja y se estarían produciendo pérdidas económicas. Si es superior al 65% pero inferior al 75% (Regular) , estaríamos hablando de competitividad baja y pérdidas económicas. Entre el 75% y el 85% (Aceptable) comenzaríamos a hablar de valores aceptables aunque todavía podrían existir pequeñas pérdidas y sería muy importante avanzar.
A partir del 85% (Bueno) estaríamos hablando ya de empresas con una buena competitividad, entrando en la excelencia cuando es superior al 95% (Excelente).
¿Qué importancia tiene esta medición?
Los expertos consideran que elaborar un estudio de eficiencia de los equipos es la herramienta de evaluación más importante para conocer el estado real de la empresa, ver cuáles son sus puntos débiles y cómo se puede avanzar.
Existen empresas especializadas en la realización de estos estudios que pueden elaborar un informe muy pormenorizado de la situación de la empresa. A partir de este informe se pueden comenzar a valorar planes de futuro y cambios de rumbo en una empresa.
Pero no se trata tan solo de un informe, sino de elaborar un plan de OEE que permita detectar la aparición de cualquier problema que pueda estar reduciendo la puntuación final para darle solución antes de que se cronifique.
Está demostrado que con un buen plan de OEE también mejora significativamente el rendimiento de los empleados, que saben en cada momento dónde deben de centrar sus esfuerzos para que todo funcione correctamente y qué aspectos hay que corregir para poder trabajar obteniendo el máximo de beneficios.
Por tanto, no solo se puede medir la eficiencia de los equipos, sino que esta medición es fundamental para poder evaluar el rendimiento de cualquier empresa y avanzar cara al futuro.