La danza se conoce como expresión artística basada en los movimientos del cuerpo en conjunción con la música. Las clases de danza tienen pues una relación directa con aprender el sentido de la representación artística y se equiparan popularmente con las clases de baile, aunque esta concepción lleve implícito un aire más modernizado de la danza.
Podemos decir entonces que el concepto de la danza también tiene que ver con la cultura de las razas, teniendo estas su propia expresión y movimientos que acompañan a una música y unos sonidos también de origen étnico, social y cultural. Estas danzas han ido evolucionando a través del tiempo y de la evolución de la sociedad en cada región del Mundo, adoptando usos y ritmos propios dando origen al denominado folklore de un país.
La danza ha acompañado desde hace miles de años al hombre en multitud de expresiones religiosas formando parte de rituales y liturgias. Ritos de iniciación, danzas guerreras, de fertilidad, mágicas y de determinadas celebraciones. Hoy en día, muchas danzas y bailes se enfocan hacia el espectáculo y el entretenimiento de un público. Y además de la danza clásica y la contemporánea, este aprendizaje y práctica de la actividad más ancestral del hombre como expresión artística, las clases de baile en sí mismas incorporan gran parte del folklore.
Se toman clases en centros profesionalizados, teniendo en cuenta que el usuario podrá encontrar opciones en escuelas de autor privadas, en escuelas nacionales dependientes de los organismos competentes en cada país, y en escuelas de baile donde figura la danza como asignatura o disciplina.
Por un lado encontrarán la danza académica, cuyo aprendizaje y método de enseñanza está reglamentado y sistematizado, así como los movimientos y pasos a realizar. Tiene mucho en común con la danza clásica, con origen aristocrático europeo y cuya expresión ha derivado en el ballet clásico.
A partir del ballet nace la danza moderna, que busca una mayor expresión del baile mediante movimientos más libres que muestran emoción e ideas. El vestuario y la puesta en escena cambian y se permite mayor expresividad pero guardando formas del ballet todavía.
Luego llega la danza contemporánea, que deja de estar basada en el ballet clásico y abandona la rigidez para buscar la máxima expresividad que represente estados de ánimo, sentimientos, ideas y emociones. Las clases de danza contemporánea, como en los casos antes expuestos, son materia de formación de las diferentes escuelas y pilares todos del bagaje de todo bailarín.